La caza a rececho es una modalidad de caza que se practica en todo el mundo y que consiste en la búsqueda del ciervo seleccionado por su trofeo, o sencillamente para darle caza, realizando una aproximación silenciosa sin abatirlo. En ella interviene un único cazador y un guarda que supervisa la cacería, siendo en muchos casos imprescindible la presencia de algún auxiliar para transportar a los animales.
Para lo cual se precisa un gran conocimiento del terreno, de la ubicación y la abundancia de las poblaciones y de las querencias de los animales. Con lo cual, la compañía del guarda no se limita solamente a las labores de control y vigilancia, sino que es una figura indispensable para el éxito de la cacería.
Pero también se requiere de una buena óptica, tanto para localizar al animal como para realizar el disparo, ya que normalmente suelen efectuarse a distancias relativamente amplias. Cuando el cazador se encuentra a una distancia adecuada de tito, se efectúa el disparo.
Si eres amante de este tipo de caza o estás pensado en empezar a practicarla, a continuación te explicamos cuáles son las mejores zonas para cazar ciervos en España.
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Zona norte: la experiencia más salvaje
Al igual que ocurre en los bosques europeos, los ciervos pueden berrear sin ser percibidos. Por eso, si te gustan las extensiones amplias y sin cerramientos, es tu zona. Algunas de las mejores áreas son la Sierra de la Culebra en Zamora, la zona de Fuentes Carrionas, y las provincias de León y Cantabria. Todas ellas con el majestuoso paisaje de los Picos de Europa como telón de fondo.
Las reservas de esta región mantienen unas densidades de población bajas, por lo que la modalidad de caza más habitual es la de rececho. Cuenta con unos cupos dirigidos únicamente a favorecer la presencia de cuernas de buena calidad. Con lo cual, las posibilidades de cobrar un trofeo de categoría son muy altas, puesto que, los guardas conocer muy bien los escenarios de celo de los grandes venados.
En los últimos años, en esta región se han logrado grandes trofeos gracias a la excelente gestión de las reservas de caza de Fuentes Carrionas y la Sierra de la Culebra.
La mejor época para ello es desde mediados de septiembre, ya que es cuando las hembras entran en celo.
Zona sur: ciervos al sol
Las mejores zonas para la caza del ciervo del sur de España son Sierra de San Pedro, Sierra Morena y el Valle de Alcudia. Por lo general, se encuentran en fincas privadas con cerramientos, pero también podemos encontrar reservas de caza como el Parque Natural de Los Alcornocales de Cádiz y el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas. La berrea suele comenzar entre finales de septiembre y principios de octubre.
La abundancia de las poblaciones es tan que es la región donde más posibilidades hay de abatir un gran ejemplar. Son habituales las fincas privadas donde se practica la montería. Y durante la temporada general se abaten muchos y buenos venados. Pero también hay zonas donde la densidad es baja, pensadas para lograr trofeos medalla, generalmente en modalidad de rececho. De hecho, es una zona en la que se han conseguido grandes trofeos.
Zona centro: la región más tranquila
El Sistema Central, los Montes de Toledo y el Alto Tajo cuentan en sus bosques con poblaciones de ciervos que constituyen un verdadero lujo. En esta región se localizan varias reservas de caza, como el Parque Regional de la Sierra de Guadarrama y la Sierra de Gredos. Pero además, podemos encontrar una gran cantidad de fincas cerradas con gran reputación, como los cotos de El Pardo y El Castillo de Viñuelas. Siendo la mejor época para la caza del ciervo a partir de finales de septiembre
Es cierto que su densidad es baja, pero no debemos descartar la opción de hacernos con un buen ejemplar. Hay que tener en cuenta que en la zona no se caza ni a rececho ni en montería, por lo que es habitual que los animales lleguen a edades avanzadas.
Estos paisajes se encuentran dominados por bosques de pino de Valsaín y pinaster, dehesas de encinas, montes, fresnos y zonas muy elevadas que alcanzan los 2.000 metros y donde encontramos vegetación de montaña. Con lo cual, es importante que el cazador se camufle a conciencia con estampados verdes y marrones.