Una afición que no deja de crecer, así como el valor de sus piezas, es la pasión por las colecciones de armas de fuego antiguas. En los últimos años hemos podido ver cómo muchas piezas de gran valor del siglo XVII eran subastadas en las mejores galerías del mundo. Muchas de ellas en un excelente estado de conservación, procedentes de colecciones privadas, con precios que llegan a alcanzar los seis dígitos y, en algunas ocasiones, por lotes, ya que son mucho más apreciadas en grupo, sobre todo si son de la misma época y del mismo fabricante.
Las armas antiguas originales al año 1890 son de venta libre en toda Europa. Las conocidas como armas de avancarga monotiro, ya sean réplicas u originales, son de venta libre en países como Alemania o Italia y las de repetición en países como Bélgica, Francia, Reino Unido o Polonia.
Al tratarse de armas de complicado manejo y de muy difícil carga, no resultan de interés ni para la delincuencia ni para el terrorismo. Con el añadido de que provocan un gran estruendo y producen una gran nube de humo, lo que delata cualquier posible uso ilegal que se realice con ellas, y de que es muy complicado conseguir pólvora negra para cargarlas, tanto por su alto precio como por estar muy controlada.
Así pues, no tiene ninguna lógica que se dedique tiempo, esfuerzo y personal por parte del Estado a fiscalizar y registrar arcabuces del siglo XVIII, desvencijados revólveres Lefacheux de munición obsoleta o pistolas de duelo del siglo XIX y a repartir sanciones en comercios anticuarios o en ferias de antigüedades. Y es que el resultado en seguridad ciudadana es nulo, sobre todo cuando se trata de armas muy antiguas, como las de sílex o rueda, que carecen incluso de numeración o que se encuentran bastante deterioradas.
Legislación sobre armas antiguas en España
Sin embargo, en España, el reglamento del año 1981, en lugar de aportar seguridad al país, sólo sirvió para hundir el sector armero avancarguero español, que en su día fue de gran relevancia. Haciendo un daño considerable al tiro creativo, de competición, histórico, y al estudio y al coleccionismo de las armas antiguas y de avancarga.
Con lo cual, aunque podemos encontrar grandes subastas de antigüedades que incluyen este tipo de armas en Londres, París o Milán, en España la legislación actual solamente pone obstáculos al comercio y a la exportación de las mismas, fiscalizándolas como si fueran armas modernas.
Por eso, los coleccionistas de armas antiguas están pidiendo al Gobierno que se lleve a cabo una regulación más parecida a la de Francia, donde la venta de armas de avancarga de diseño anterior a 1890 y las originales anteriores a 1899 excluyendo armas semiautomáticas a excepción de modelos raros o de munición obsoleta es libre.
Afortunadamente, aunque la venta libre es más complicada, la legalidad vigente en España no exige licencia para su posesión, siempre que sean inscritas en los Libros-Registro y que sean conservadas en museos o en armeros de los que sean titulares los organismos o coleccionistas con finalidad histórica, cultural o artística, reconocidos por el Ministerio de Interior como tales. Eso sí, queda prohibido su uso a menos que se haga en galerías, campos y polígonos de tiro controlados para prácticas, siempre que se haya obtenido la autorización especial en la forma prevenida en el artículo 101 del Real Decreto 137/1993, de 29 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de Armas y en la Resolución de 27 de marzo de 2015.
¿Dónde pueden encontrarse más armas antiguas?
En cualquier caso, lo cierto es que el gran mercado de armas antiguas se encuentra en Estados Unidos, donde existe una auténtica fiebre sobre todo por las armas que se fabricaron durante la Guerra Civil que tuvo lugar en el país entre 1861 y 1865. Por ejemplo, el Colt (fabricado desde 1835), los Smith & Wesson (desde 1852), Winchester (desde 1866), por decir los más conocidos, son los que más interés despiertan para los coleccionistas.
En el resto del mundo, probablemente sea Reino Unido la que reúne a los mayores coleccionistas, quizás porque fue en este país donde se fabricaron las armas de fuego más representativas del siglo XVIII. Aunque Alemania, Italia, Francia y Rusia también fabricaron buenas armas de fuego en diferentes épocas.
Eso sí, los rusos siguen ostentando el primer puesto del ranking del mejor fusil de asalto de todos los tiempos: el AK-47 Kalashnikov, del que se han producido más de 100 millones entre 1949 y 2011. Por su parte, los mosquetones alemanes de la I Guerra Mundial, los Mausers, de finales del siglo XIX, y las pistolas parabellum, de principios del siglo XX, o las beretta italianas, que se llevan fabricando desde comienzos del siglo XVI, son todas las marcas míticas que cualquier coleccionista desearía tener en sus vitrinas.
Pero además, al igual que ocurre en todos los segmentos del coleccionismo, también podemos encontrar una amplia variedad de piezas raras, que son las más valoradas por estar fabricadas por armeros en exclusiva para un cliente de manera eventual. Así pues, podemos encontrar piezas muy interesantes en Colombia, Argentina, México, Japón y China, muchas de ellas salvadas de la quema tras la II Guerra Mundial. En España, por ejemplo, podemos ver grandes colecciones en los museos más importantes y en las casas de coleccionistas privados, como Jesús Madriñán, que cuenta con una de las más interesantes del país.
España como siempre todo esta prohibido ,,,Es una dictadura mayor a Venezuela ya que por ejemplo en Venezuela si podias comprar un revolver del 38 legalmente sin problemas ESPAÑÁ ES EL CULO DEL MUNDO Y LA RUINA DE ARMEROS.PAIS RETRASADO ,,España hace 100 años era mucho mas libre Con fabricantes de Armas de los mejores del mundo en todo el Pais Vasco .